Las fotografías tomadas por la periodista Lourdes Mendoza Peñaloza en donde se ve in fraganti al exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, en plena fiesta en el restaurante Hunan en Lomas de Chapultepec, dieron mucho de qué hablar en las redes sociales, en donde el tema se volvió tendencia de inmediato.
El “Análisis de conversación digital: aparición pública de Emilio Lozoya”, realizada por la empresa Metrics del 9 al 11 de octubre, deja ver que las opiniones fueron favorables para la también columnista de El Financiero y Eje Central, en donde los internautas señalan que la periodista siempre ha sido muy profesional y celebran su valentía al mostrar las imágenes del exfuncionario y poner al Gobierno de México en evidencia.
El tema sobre el exfuncionario peñista alcanzó a 55 millones 179 mil 094 usuarios de las redes sociales, generando 362 mil 606 publicaciones en Twitter, así como mil 378 notas en Google y 2 millones 210 mil 318 publicaciones en Facebook.
Entre las palabras o conceptos más usados en torno al personaje Emilio Lozoya se usaron los términos “arraigado”, “brazalete”, “criminal” y “hunan”; mientras que el concepto “impunidad” destaca por la relación que hacen líderes de opinión y usuarios con la Fiscalía General de la República (FGR) y el Gobierno de México.
Cabe destacar que en la conversación sale a relucir Jenaro Villamil, presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR), quien se empeñó en desestimar las imágenes publicadas por Mendoza Peñaloza al asegurar que las fotografías no habían sido tomadas el día que fueron reveladas.
La periodista Lourdes Mendoza Peñaloza, quien ha interpuesto una denuncia contra Lozoya por “daño moral” tras demostrar que sus dichos sobre haber recibido una supuesta bolsa son falsos, obtuvo en redes sociales un 93% de impresiones positivas.
En tanto, para la FGR liderada por Alejandro Gertz Manero la conversación fue 89% negativa y 11% positiva, destacando que ha brindado protección a Emilio Lozoya, lo que permite que pese a estar en la mira por el caso Odebrecht y Agronitrogenados, éste pueda concurrir restaurantes lujosos.
Asimismo, subrayan que la FGR es otro de los “títeres” que funciona bajo el mando del presidente Andrés Manuel López Obrador y sus intereses.
Respecto al titular del Ejecutivo Federal, tuvo una impresión 86% negativa y 14% positiva, destacando que los internautas coinciden que el caso Lozoya es la “verdadera cara” de la 4T y que AMLO utilice la justicia a su favor.
De igual forma, los usuarios de las redes sociales exigen que se destituya a Gertz Manero, pues consideran que su gestión ha sido pésima durante el sexenio. En las menciones negativas también recuerdan que el Presidente ha defendido a delincuentes como Lozoya y al hijo de “El Chapo” Guzmán, Ovidio Guzmán.
En cuanto a las reacciones positivas, sólo se trata de usuarios que han compartido las declaraciones del mandatario respecto a que es “inmoral” la aparición pública de Emilio Lozoya en un restaurante.
Denuncia por daño moral
Desde hace más de un año la también directora de Noticias en la Mira emprendió una denuncia por daño moral contra Emilio Lozoya Austin, quien en sus declaraciones ante la FGR señaló a la periodista de haber recibido una bolsa Chanel, versión que la propia Lourdes Mendoza ha desmentido, pues la tienda no existía en el periodo que el exfuncionario dice haberla adquirido.
Tras una travesía de ocho meses para poder notificarlo del proceso, el pasado 10 de septiembre se llevaría a cabo la confesional del caso, no obstante, abogados de Lozoya precisaron que el demandado no podía acudir puesto que estaba en “arraigo domiciliario”, siendo que esta medida cautelar nunca le fue impuesta.
No obstante, el pasado 9 de octubre la periodista lo fotografió en la terraza del restaurante Hunan, en las Lomas de Chapultepec, en donde lo cachó en plena fiesta de cumpleaños de Lore Guerra Autrey, su esposo Eduardo Molina, y Doris Beckmann, hermana de Juan Domingo, cabeza de Tequila Cuervo.
Ante estos hechos, Lourdes Mendoza asegura que Lozoya cometió “fraude procesal” al mentir al juez sobre su situación jurídica para sacar ventaja y darle la vuelta a la denuncia por daño moral.
Emilo Lozoya, extraditado a México en julio de 2020, es acusado de operar con recursos de procedencia ilícita, asociación delictuosa y cohecho, tras haber recibido 10.5 millones de dólares de la empresa brasileña Odebrecht y 3.5 millones de dólares por la venta a sobreprecio a la planta Agronitrogenados.
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