Para el regreso de los burócratas a las labores presenciales, la Secretaría de la Función Pública (SFP) publicó un acuerdo en el Diario Oficial de la Federación (DOF) en el que se suprime el requisito de prueba Covid-19 para aquellos servidores públicos que retornen a sus actividades.
En el nuevo acuerdo, que cambia el anunciado el pasado 30 de julio, la SFP argumenta que la Secretaría de Salud (Ssa) determinó que las personas vacunadas después de haber transcurrido dos semanas desde la aplicación de la segunda dosis, no serán consideradas población en situación de vulnerabilidad para contraer coronavirus, por lo que el condicionante de test covid “deviene innecesaria para los objetivos que demanda el escenario actual del país”.
Asimismo, reconoce que la prevención del riesgo de contagio pretendida con dicha medida, “no es suficiente” para garantizar en mayor proporción el derecho a la salud.
Sobre ello, manifiesta que la trascendencia de los resultados de estas pruebas como medida para prevenir los contagios, está supeditada a ciertos factores como la fecha en que se toma la muestra, periodo de evolución del virus y la fecha de exposición a algún contagio.
En todo caso, si se presentara un brote o si el servidor público presentara síntomas se podría seguir laborando desde su domicilio.
El nuevo acuerdo entró en vigor este mismo martes 17 de agosto.
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